Amigos del Alma, ¿Cu谩ntas veces despreciamos a los dem谩s s贸lo porque nos parecen distintos? ¿Cu谩ntas veces nos encerramos en un peque帽o c铆rculo de relaciones, y a la vez, ignoramos a otras personas, que, por una u otra raz贸n, tambi茅n conviven con nosotros, o al menos comparten distintos aspectos de nuestra vida?
Una vez me dijo Sai Baba:”Cuando tu vecino ora a Dios, ¿No te sientes pariente suyo? ¿Acaso no est谩 pidiendo los mismos dones y al mismo dador? Podr谩 estar pidiendo en otro idioma, en otro estilo, con las formalidades de otro credo, pero su hambre y su sed son las mismas que las tuyas”
Muchas son las personas con las que nos cruzamos a diario, algunas nos simpatizan, otras nos parecen molestas o rid铆culas; a la mayor铆a ni siquiera las registramos.Sin embargo, todos son nuestros semejantes, todos estamos embarcados en el mismo viaje, todos somos compa帽eros, en la aventura de la vida. podemos necesitar de ellos en cualquier esquina. Ellos pueden precisar de nuestra ayuda en este mismo momento. ¿Estar铆amos dispuestos a darla?
Jes煤s nos desaf铆a diciendo :”Ama a tu pr贸jimo como a ti mismo”,
La palabra pr贸jimo, significa, pr贸ximo. En esa proximidad est谩 el desaf铆o de la comprensi贸n, de la solidaridad y del amor. Es f谩cil hablar del amor universal, pero ese amor se connreta s贸lo en el amor al pr贸jimo. Pregunt茅monos, cu谩nto aceptamos y cu谩nto amamos, a nuestros familiares m谩s cercanos, cu谩nto comprendemos y apoyamos a nuestros compa帽eros de trabajo, cuan solidarios somos con nuestros vecinos. Pregunt茅monos que hacemos frente a la proximidad del careciente, del marginado, del subestimado, de los que sufren todo tipo de miserias, de los que nos necesitan.
Comprender al pr贸jimo, no es entenderlo; comprender, es hacer por 茅l , lo que el otro no puede hacer por si mismo. Hacer por 茅l, lo que estar铆amos dispuestos a hacer por nosotros. Lo que esperamos que los otros hicieran por nosotros.
“La compasi贸n es como el vuelo del alma hacia el pr贸jimo”. Dice la Madre Teresa.
La compasi贸n nace de la comprensi贸n. La comprensi贸n de mis propios, me lleva a aceptar los l铆mites de los dem谩s. La comprensi贸n de mis propias posibilidades, me lleva a descubrir las posibilidades de quienes me rodean. La comprensi贸n de que ese Dios , esa energ铆a divina , que es la misma en todos y para todos, me permite abrirle caminos al otro, que tambi茅n camina , lo sepa o no, de la mano de esa misma fuerza divina y creadora.
TODO ES UNO. TODO ES AMOR. TODO ES DIOS.
Gracias por existir.
Claudio Maria Dominguez: ¿Despreciamos al pr贸jimo?
Acabo de encontrar este art铆culo de Claudio Maria Dominguez que te lo quiero compartir:
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